Club TR3SC -1,5 Euros
Club Coliseum - Jueves 01/03/2012
Philippe es un multimillonario que se ha quedado tetraparapléjico tras un accidente con parapente. Buscando a un asistente que le cuide, conoce a Driss. Un joven africano que acaba de salir de la cárcel y que se presenta simplemente para que le firmen un papel conforme le han rechazado en la entrevista, para poder seguir cobrando el paro. Pero a Philippe le gusta su desparpajo, por lo que le da una oportunidad.
A partir de aquí Driss, a quien le han echado de casa, se traslada a vivir a la mansión.
Por un lado Philippe multimillonario de gustos exquisitos como la música clásica y la pintura, de modales refinados y elegancia aristocrática. Y por el otro, Driss, joven exconvicto, porretas, apasionado del funky, que dice lo primero que se le pasa por la cabeza y con muy pocos modales.
La película es una comedia basada en una amistad osmótica. Esto es, ver como su relación encuentra un equilibrio: A Philippe le gustan las locuras de Driss, y éste refina sus modales o descubre la música clásica y el arte.
La historia se podría describir como una tragicomedia, pero no sería del todo cierto. Ya que la parte de la tragedia es la infelicidad de Philippe, más por la viudedad que por la discapacidad. Pero Driss consigue que vuelva a sentirse feliz. Con su pasotismo olvidando muchas veces que no puede moverse y con un humor ácido tirando a negro sobre la minusvalía, hacen que Philippe se sienta bien. Ya que le trata sin compasión, y eso hace que se sienta normal.
Respecto a la comedia, destacar que mantiene el ritmo durante todo el metraje. Cosa que suele ser difícil en este tipo de películas. Tiene sus escenas no cómicas para narrar la trama. Pero aún así en lo que suele ser el bajón final de las comedias donde resuelve la historia, hay una escena cómica entre ellos dos que es de lo mejor de la película. Por lo que consigue mantener las carcajadas del espectador durante las casi dos horas que dura.
La historia se centra en un 98% en la relación de ellos dos. Dejando en un segundísimo plano el resto de tramas. Hecho que hace que quizá el personaje de Driss, un supuesto exconvicto conflictivo, no quede bien definido. Siendo un personaje entrañable desde el principio, sin dar la sensación de exagerada desubicación de alguien de los suburbios que va a vivir a una mansión. Pero, no es un gran problema ya que la historia no es de quienes eran, sino de quienes empiezan a ser gracias a su amistad.
Sin excesivas reflexiones en lo que a minusvalía se refiere, ya que la única moraleja que se puede extraer es que tener compasión hace recordar las limitaciones.
Comedia altamente recomendable,. Queda justificado el hecho que este siendo una de las películas más taquilleras de Europa de los últimos tiempos.